DESARROLLO DE LA DELEGACION DE CALI DEL CUESTIONARIO
PARA EL XV ENCUENTRO DE LA PASTORAL AFROCOLOMBIANA
MEDELLIN, 2006
Ubicación Geográfica*
La República de Colombia se ubica al noroccidente del continente
suramericano. Su posición privilegiada le permite el contacto con los
afrodescendientes del Caribe y con el área de mayoría afro que se extiende desde el
suroriente de Panamá por la llanura cálida costera hasta Perú.
Región Occidental del país, ubicación del departamento del Valle del Cauca,
cruce interétnico desde hace milenios, espacio de intercambio entre Chocó, el área
inmensa del municipio de Buenaventura y el norte del valle del río Cauca, zonas de
fuerte influencia étnica afrocolombiana.
Santiago de Cali, la capital del Valle, dentro de la economía nacional, una de las
tres áreas metropolitanas más importantes del país, la segunda en población. Su
influencia se extiende desde el Eje Cafetero hasta el norte de Ecuador.
Los barrios Comuneros, Mojica, El Retiro, Marroquín, Charco Azul y El Poblado se
encuentran ubicados en la zona sur-oriental de la ciudad conocida como el
Distrito de Aguablanca. Entre el 80 y el 95% de su población es
afrodescendiente. Se estiman unos 4.300 habitantes afros en el Distrito. La zona
se caracteriza por el abandono y la marginación por parte del estado en todas sus
formas. En las zonas donde predominan otras etnias llegan al 12%.
Este trabajo inicia con una descripción de los aspectos más importantes que forma
parte del diario vivir de las comunidades de las comunas 13, 14 y 15 de las 21 en las
que se subdivide la ciudad. En el área rural, destacan por tener una gran población
afro los corregimientos de El Hormiguero y Cascajal, cerca de las orillas del río
Cauca. Los jóvenes afrodescendientes participan en la construcción de una
sociedad más justa y solidaria. Dentro de este proceso se logran establecer y definir
algunos problemas y desafíos que más les afecta, como son:
- Violencia intrafamiliar
- Educación insuficiente
- Desempleo
- Salud sexual y reproductiva en asedio
- Transformación de valores éticos y morales
Estos factores desestabilizan social, afectiva y espiritualmente a los jóvenes
afrodescendientes.
1. ¿Cuál es el rol de participación del joven
en la construcción social de su región?
- Los jóvenes participan en proyectos sociales en los barrios, los caracteriza su
liderazgo: Crean grupos de capacitación, deportivos, de danza, musicales y
otras actividades culturales, sobre todo artísticas y folclóricas. Gestionan
becas y ayudas.
- Los identifica su sinceridad para decir las cosas, manifestar sus ideas y su
forma de ver el mundo. Muchas veces eso los hace ver como rebeldes o
irreverentes ante la sociedad. El valor de la amistad en ell@s adquiere
importancia especial.
- Su aporte se siente en la formación de empresa, en su perfil de futuro. Su
energía es un motor que actualiza la ciudad frente a muchas tendencias
mundiales. Sobresalen en el uso de las nuevas tecnologías, su presencia es
permanente en todo tipo de debates.
- Son los que más practican deportes como fútbol, baloncesto y el ciclismo de
forma utilitaria. Cuando no existen los espacios adecuados, se adueñan de
las calles de forma temporal, pueden utilizar terrenos abandonados y
transformarlos en canchas o gimnasios rudimentarios. En las calles es
frecuente encontrar parejas de jóvenes compartiendo una sola bicicleta.
- En la Iglesia inician, animan, integran y proyectan grupos juveniles al
interior de las parroquias. Aún buscan una organización grande a nivel
municipal en forma de red. El estado, ante sus múltiples iniciativas a nivel
nacional, les presentó un proyecto de Ley Juvenil; la respuesta, vigente en
Cali, es el Concejo Municipal de Juventud donde convergen jóvenes elegidos
por las organizaciones con integrantes menores de 26 años. Su meta es
unirse con otros concejos en el resto del país para ganar más experiencia,
consolidar el proceso a nivel nacional y ganar más espacio político.
- Su mano de obra es un gran aporte a la economía de la ciudad; se les explota
con la excusa de no tener experiencia aunque su trabajo sea de buena
calidad. La presencia afro es evidente en los obreros de la construcción, los
voceadores de periódico y los lavaderos de carros. En las áreas rurales
aledañas, cortan caña, pescan, transportan materiales de construcción y
comercian productos agrícolas.
- La gran mayoría, cuando están en el último grado de bachillerato,
alfabetizan a personas de la comunidad que no tienen acceso a la educación
formal. En la educación superior, asisten sobre todo a la Escuela Nacional
del Deporte, las universidades Santiago de Cali y del Valle.
2. Desafíos más urgentes en la realidad juvenil de mi región que
debemos asumir como Pastoral Afrocolombiana
Para el desarrollo de esta pregunta hemos analizado diferentes aspectos y
problemas que agobian a los jóvenes de la ciudad de Cali y ubicamos las que
consideramos más urgentes:
- El primer desafió que encontramos en los jóvenes de esta región es el
desempleo. Las pocas oportunidades laborales hoy causan desajuste y
desequilibrio económicos; ocasionan en gran medida que se perpetúen las
necesidades básicas insatisfechas y que muchos tengan que abandonar sus
estudios de bachillerato, técnicos o profesionales. La difícil situación
económica de sus hogares los fuerza a hacerlo, el desempleo es una cadena
que afecta a toda la comunidad. Por otro lado, son muchos los jóvenes que
hacen parte de organizaciones afro que se desplazan, a otros lugares del país
o tal vez a nivel internacional, en busca de nuevas oportunidades laborales.
Este abandono debilita procesos organizativos que apuntan a la
construcción de una pastoral afrojuvenil sólida y con ideas de liderazgo
comprometidos. La falta de empleo los obliga a buscar oportunidades en
lugares lejanos e impide la continuidad del proceso.
- La violencia producto del abandono del estado, el conflicto armado, las
mafias y la discriminación estructural obliga a muchos a cambiar de barrio,
de ciudad o salir del país como refugiados. Los referentes positivos
abandonan los espacios de mayoría afro y se establecen en zonas más
prósperas pero con menor influencia de su etnia. El desafío está en generar
alternativas de intercambio con su cultura de origen y posibilidades de
compartir su saber y su experiencia en áreas afro marginalizadas.
- Acompañamiento al joven en la educación de la salud sexual y reproductiva,
con acciones que replanteen la concepción de los valores éticos y morales en
la construcción de una comunidad afrojuvenil más respetuosa de la vida. La
responsabilidad de la noción del sexo como acto de respeto y prolongación
de la existencia, y en ese sentido de la cultura, está en retroceso. Hoy el
desequilibrio social generado con los embarazos a temprana edad se
convierte en un problema familiar que repercute en todos las instituciones
sociales. La iglesia no puede ignorar y permanecer insensible ante esta
situación, las futuras generaciones están en crisis de valores por una
problemática social que viven las generaciones actuales. Los riesgos que
corren hoy las y los jóvenes ante las transformaciones significativas de sus
valores éticos y morales no pueden seguir siendo analizados como una
situación lejana o tal vez común. Si bien es cierto, en todas partes se
promueven los buenos valores, desde la escuela hasta la Iglesia, hoy la
Pastoral Afrocolombiana debe unir esfuerzos y empezar de manera concreta
a contrarrestar estas situaciones.
- Otro desafió al que se enfrenta la Pastoral en la ciudad de Cali, y otra región
vecina como el Cauca, es el fortalecimiento en la reflexión y formación de
líderes a través de acciones pastorales de capacitación continua. Tomamos
como referencia la escuela de Huellas Africanas de Buenaventura, que forma
a líderes afrocomunitarios de diferentes partes de la Costa Pacífica. Existe la
necesidad hoy en los jóvenes, y en general en la pastoral afrocaleña y
afrocaucana, que se creen espacios de capacitación afro desde la Pastoral
Afrocolombiana. Es allí donde se comparten los saberes de la historia y los
avances del pueblo negro, constructor de vida y de sociedad. Liderar grupos
que no pierdan la esencia del mensaje evangelizador de la Iglesia, que no
pierdan de vista a Cristo como su salvador, desarrollando el compartir y la
solidaridad que caracteriza al pueblo negro.
- Apoderarnos de expresiones y formatos en los medios de comunicación,
muchos de ellos subutilizados. Las comunidades son ricas en expresiones de
todo tipo pero es poco lo visibilizado, nos constituimos en pueblo
consumidor más que productor de símbolos propios. Las organizaciones
internacionales Son las que más valoran nuestras tradiciones. En todo el
Pacífico colombiano se han dado experiencias de radios comunitarias que
son ejemplo para el mundo, pero a duras penas se les conoce en medios
académicos. Desde la Pastoral puede promoverse el uso responsable de
herramientas de producción en comunicación e iniciativas que generen los
recursos necesarios para su adquisición.
- La familia afro parece un fantasma en todo el proceso organizativo, incluso
el pastoral. Su mención sigue siendo marginal, a pesar de que se han
dedicado encuentros enteros a cada uno de sus componentes. La realidad de
la familia extendida con hijos numerosos sufre ataques en cada
confrontación con formas globalizadas de entender el núcleo primario. En
las ciudades la idea de una mujer, un hombre y un hijo como patrón de
unidad se promociona de múltiples maneras. Las relaciones “hacia arriba”
en el árbol genealógico (padres, tíos, abuelos, primos, parientes políticos) no
se consideran familia, incluso desde lo legal. Los jóvenes pierden uno de los
baluartes más importantes a la hora de reproducir cultura y muchos asumen
la noción ancestral de la fertilidad como defecto y no como virtud. El
anciano, en la sociedad industrial, es un individuo al que, en el mejor de los
casos, se le reserva el descanso. El hondo respeto africano a la experiencia, a
la tradición sostenida en el “anciano sabedor” se difunde ante la idea del
pensionado como sujeto no útil para el empleo industrial. Se corre el riesgo
de que los renacientes se conviertan en mera reproducción de esquemas no
afro. El desafío es desarrollar la familia afro como máximo espacio de
reproducción de la fe, la cultura y todo lo positivo.
3. Experiencias que ha dejado para mi comunidad la participación
en los Encuentros de Pastoral Afrocolombiana
- Se destaca la importancia de la alegría y el compartir de las diferentes
experiencias que hacen presencia en los encuentros.
- Nos proyectamos en los grupos de trabajo de nuestra comunidad.
- Las experiencias compartidas y aprendidas motivan a desarrollar trabajos de
liderazgo con otras personas.
- Ayudan a transformar concepciones de vida cada vez que se participa en
ellos.
- Adquirimos identidad y fortaleza desde la Iglesia con rostro negro.
4. El acompañamiento que hace la Pastoral Afro
al joven en mi comunidad
La pastoral afrocaleña es protagonista en los diferentes escenarios en donde se
mueve cada uno de sus integrantes, es ahí donde hace acompañamiento: en
cada uno de los diferentes escenarios donde cada cual transmite los
conocimientos culturales y éticos que se predican desde la Pastoral en sus
familias, en los colegios y parroquias donde se desenvuelven. Los jóvenes que
están a nuestro alrededor se contagian de los valores promovidos. Otro
acompañamiento está en la construcción y el fortalecimiento de nuestra
identidad en los jóvenes en la conformación de la comunidad Eclesial y como
individuo protagonista de una historia. Cada familia integrada por los
miembros de la pastoral logra que el joven conozca sus tradiciones y valores
culturales y rescate la esencia de sus ancestros.
[*] Los mapas
de Colombia y del Valle Cauca proceden de Microsoft Encarta, el de Cali del
IGAC, el de las comunas de
cali.gov.co.
Se reproducen con intenciones meramente educativas e informativas.