Salmo 137

Al borde de los canales que pasan por Babilonia
nos sentábamos llorando a recordar a Sión.
En los sauces que allí crecen
habíamos colgado nuestras arpas.

Entonces nuestros vencedores nos pedían canciones
y nuestros opresores un canto de alegría:
“¡Cántenos, nos decían, un canto de Sión!”

¿Cómo íbamos nosotros a cantar canciones del Señor
en un suelo extranjero?
Si me olvido de ti Jerusalén,
que mi mano se olvide de servirme.
Que mi lengua se pegue al paladar
si de ti no me acuerdo,
o si Jerusalén no es para mí mi mayor alegría.

Calle 44 No. 41D-21
Barrio Unión de Vivienda Popular
Tel. (2) 403 87 32
Parroquia Santo Evangelio
Tel: (2) 328 328 7
Cali, Colombia

INICIO

PRESENTACION

DOCUMENTOS

Qué es  |  Para qué  |  Por qué  |  Quiénes la hacen  |  Cómo se hace